Ni testigos ni pistas ni cadáver. Josy, la hija de doce años del conocido psiquiatra Viktor Larenz, desaparece en misteriosas circunstancias de la consulta del médico que la trata de una inexplicable dolencia.
Cuatro años después, Viktor, sumido en una profunda tristeza, se ha retirado a una remota casa en una isla del Mar del Norte. Allí lo localiza una hermosa desconocida que padece alucinaciones: ve constantemente a una niña pequeña, una niña que sufre una extraña enfermedad y que desaparece sin dejar rastro de la consulta del médico. Viktor inicia entonces un tratamiento con la desconocida, pero la terapia se convierte paulatinamente en un dramático interrogatorio... ¿Es posible lo inconcebible? ¿Describen los delirios de Anna los últimos días de Josy?
Editorial: Ediciones B
Páginas: 304