Entre 1808 y 1816, Hegel, que había publicado ya la Fenomenología del Espíritu y trabajaba en la redacción de la Ciencia de la Lógica, se desempeñó como rector y profesor del colegio humanístico (Gymnasium) de Núremberg. Los textos reunidos en este volumen ─discursos, informes y cartas─ dan cuenta del tenor de sus hondas reflexiones acerca de la educación que el estado debía ofrecer a los jóvenes más aptos. Él supo también con toda claridad cómo llevar a la práctica ese ideal pedagógico de alcance intelectual y moral a la vez. Y si este en nuestro mundo posmoderno, el del pluralismo radical, resultase algo quimérico, la elevación de sus miras, de cuño genuinamente filosófico, no se vería menoscabada por ello en un ápice.
Editorial: Losada
Páginas: 216