Una ola migratoria procedente del Piamonte transformó totalmente el paisaje humano del interior de la Argentina. Entre 1875 y 1914, después de la unificación de Italia y antes de la Primera Guerra Mundial, un enorme número de piamonteses se instalaron en las provincias de Córdoba y Santa Fe. En esta región, llamada “Pampa Gringa”, los piamonteses guardaron durante muchos años su cultura, y desde luego uno de los rasgos salientes fue la lengua, la cual se mantuvo en el uso cotidiano hasta la década de 1950. Este estudio del Dr. Marco Giolitto, basado sobre entrevistas a más de 300 personas, pretende reconstruir la historia social del uso del piamontés en los ámbitos de la escuela, del trabajo, de la familia y de la vida cotidiana.
Editorial: Prohistoria