Somos la única especie, en medio de millones en la naturaleza, que piensa, tiene conciencia de sí misma y escribe su propia historia. Un privilegio indescriptible. ¿Pero hemos escrito una historia que nos libera o una que nos aprisiona? Muchos viven en sociedades libres, aunque permanecen esclavos de sus propias emociones. Todos queremos tener una mente saludable, plena de placer, segura, con capacidad de resiliencia y creativa, pero con frecuencia la dejamos suelta, sin control. Mentes tímidas, agitadas, ansiosas, inmaduras, pesimistas, atemorizadas, fluctuantes y depresivas son consecuencia de la falta de entrenamiento, gestión y protección-.
Editorial: Planeta
Páginas: 128