EXISTE UN JUEGO AL QUE JUEGAN LOS INMORTALES.
SOLO HAY UNA REGLA: NO PUEDES PERDER.
Viola Marek es una agente inmobiliaria en apuros, además de vampira. Pero, en estos momentos, su mayor problema es que la casa que tiene que vender está encantada. El fantasma que la habita murió asesinado y se niega a abandonarla hasta que resuelva el misterio de cómo falleció.
Fox D’Mora es médium y, aunque es un auténtico fraude, no es del todo inútil teniendo en cuenta que es el ahijado de la Muerte.
Cuando Viola recurre a Fox para pedirle ayuda con el fantasma de la mansión, este se ve inevitablemente envuelto en una misión que ni Viola ni él esperan (ni desean). Pero con la ayuda de un poltergeist rebelde, una entrenadora personal demoníaca, un ángel mordaz, un segador enamorado y varias criaturas adeptas al mindfulness, Vi y Fox descubren que la diferencia entre un misterioso amor perdido y un cadáver molesto no es tan evidente como pensaban.
Editorial: Umbriel
Páginas: 448