Ema tiene un nombre fácil pero un pelo muy difícil, como un río enredado. Para escribir su nombre alcanzan tres letras, pero para desenredarle el pelo no hay peine que alcance. Eso a la mamá de Ema la pone LOOOOOOOOOOOOOCA cada mañana que la peina con un peine cocodrilo. Y para Ema cada nudo desenredado es un ¡Ayayayayayayay! acompañado de lagrimones. De pronto aparece en escena Emota: grandota, despeinada, con las rodillas sucias y las medias caídas. Ella sí tiene la estatura para poner las cosas en orden.
Un cuento de humor y poesía con el que muchos(as) pelones(as) y desgreñados(as) se divertirán.
Editorial: Fondo de Cultura
Páginas: 28