Unas vacaciones en una casa con jardín cerca del mar, son ideales para vivir muchas aventuras. La pequeña está feliz, va a poder investigar y explorar todo a su alrededor: las plantas, los insectos, los pájaros. Pero como suele suceder, mamá y papá tienen otra idea: dormir la siesta. ¡Cómo va a dejar de jugar justo ahora! Así que igual que el sol —que no le hace caso a nadie, se cuela y se escapa por donde quiere— se va solita al jardín donde la esperan algunas sorpresas.
Editorial: Fondo de Cultura
Páginas: 44