Para Borges, Kafka fue uno de los más grandes autores de la historia de la literatura y el más destacado del siglo XX, ya que podemos leerlo y pensar que sus fábulas son tan antiguas como la historia, que esos sueños fueron soñados por hombres de otra época sin necesidad de vincularlos a Alemania o a Arabia. Quizás por esto es que lo kafkiano ya no remite sólo a su obra, sino a situaciones en general en las cuales la realidad se vuelve absurdamente complicada, angustiante e inverosímil, y en donde se ponen en evidencia las relaciones de poder que parecen gobernar, en última instancia, las decisiones de los individuos.
Es lo que sucede en La metamorfosis, su obra más conocida, en donde un acontecimiento fantástico en la vida de Gregorio Samsa hace aflorar la mezquindad en sus vínculos familiares. Y, aunque Un informe para una Academia es un cuento en donde sale a la luz la vena irónica de Kafka, subyace en él la violencia ejercida por el ser humano. Se trata de dos obras cuyo eje sería la transformación (un hombre que se convierte en una cucaracha; un mono que piensa y habla como una persona) y nos permiten poner en duda esa diferencia que históricamente se ha trazado entre el mundo animal y el nuestro, supuestamente civilizado.
Como dice Pablo De Santis en el prólogo a esta edición, han pasado más de cien años, y todavía no sabemos qué significan estas fábulas sombrías, excepto que hablan de nosotros.
Editorial: Colihue
Páginas: 96