"Quizás sea buena idea pensar al nacionalismo como una filosofía práctica, concreta, comunitaria, de valores marcados por la amistad", propone Hernán Brienza. Para ello reconstruye los pilares sobre los que se erigieron 200 años de imaginarios. Interesado en la erradicación de las formas represivas con las que ha sido pensado el nacimiento y el desarrollo del capitalismo argentino por una clase dominante, sugiere ver al Estado como un espacio de encuentro entre ciudadanos. "Los argentinos, salvo en contadas ocasiones, no hemos podido construir una Nación homogénea. Apenas hemos logrado diseñar un teatro de operaciones en el que protagonizamos un combate perpetuo entre nosotros mismos."
Para revertir esta perversa dinámica social que mantiene al país preso de un virtual "empate hegemónico", el autor repasa vida y obra de escritores y políticos argentinos y analiza las circunstancias históricas internas y globales en las que surgieron y difundieron las ideas de Belgrano, Alberdi, Sarmiento, Gálvez, Ricardo Rojas, Lugones, Manuel Ugarte, Raúl Scalabrini Ortiz, Jauretche, Juan José Hernández Arregui y Juan Domingo Perón, entre otros
Apasionante y revelador, este abordaje dinámico construye un fresco que parte de la literatura y la historia, para sistematizar un ideario tan amplio que abarca desde nociones republicanas y fascistas, pasando por la derecha y la izquierda, hasta el catolicismo, el liberalismo y la revolución.
Editorial: Aguilar
Páginas: 288