De las tantas versiones que circulan del I Ching, pocas han sido tratadas con una perspectiva creativa; el hecho de aproximarse al oráculo de un modo diferente, sin traicionar su esencia, no es algo que sea común, sobre todo en aquellas versiones que se aferran a lo convencional repitiendo esquemas harto conocidos, y de lo que ya hay bastante. Aquí la propuesta es distinta. Oráculo y consultante confluyen en la cadencia de una voz; es a la vez un rito y un juego del destino.
Editorial: Galerna