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«Tres vieron que yo no tiré ninguna piedra. Tal vez haya otros: que hablen.»
En 1916, Harper´s publicó, primero por entregas en su célebre Magazine y luego como libro, El forastero misterioso, una obra inédita y desconocida de Mark Twain, que había muerto seis años antes.
La novela sorprendió. Si bien aparecían algunos rasgos aislados del humor de Twain, de su prosa había desaparecido ese sentido satírico que fuera una de sus marcas. Su indulgencia hacia el género humano se había trocado en una amarga condena.
El protagonista es un ángel llamado Satán, sedicente sobrino del Otro, el caído. Este Satán traba amistad con tres jóvenes que habitan en el villorrio de Eseldorf, Austria, en 1590, y les muestra la historia de la civilización en oportunos viajes por el tiempo y el espacio, desde Caín hasta un futuro
Editorial: Longseller
