Este es probablemente el libro más célebre del filósofo alemán Jürgen Habermas y la obra que catapultó su carrera. Publicado en 1968 -en el contexto de la disputa sobre el positivismo-, examina las corrientes más importantes del pensamiento moderno: kantismo y hegelianismo, pragmatismo anglosajón y tradición hermenéutica alemana, marxismo y psicoanálisis. Mediante el análisis de estas corrientes de pensamiento, Habermas indaga en los procesos de investigación que determinan el significado y la validez de nuestras afirmaciones científicas. Únicamente una teoría social permite una crítica radical del conocimiento: esa es la tesis esencial de Habermas. Con esta premisa, no solo interviene en la discusión positivista orientada a cuestiones de método, sino también en la discusión política orientada a la práctica.
Editorial: Taurus
Páginas: 432