Se llama Lucas y aquí está otra vez. Con la cabeza llena de rulos, como en el cuento anterior. Pero con un hermano: Simón.
Simón acaba de nacer y la vida de Lucas no para de cambiar.
Primero por que ya no es el único chico de la casa. Segundo, porque se ha convertido en el hermano mayor (que no es lo mismo que ser un mayor). Y tercero, por que le dan más seguido que nunca unos terribles ataques en que todo se le pierde, hasta las letras de su nombre.
Editorial: Sudamericana
Páginas: 30